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martes, 13 de noviembre de 2007

Vida y milagros de San Benito

Vida de oración disciplina y trabajo.
Se levantaba a las dos de la madrugada a rezar los salmos.
San Benito, pasaba horas rezando y meditando. Hacia también horas de trabajo manual, imitando a Jesucristo. Veía el trabajo como algo honroso. Su dieta era vegetariana y ayunaba diariamente, sin comer nada hasta la tarde. Recibía a muchos para dirección espiritual. Algunas veces acudía a los pueblos con sus monjes a predicar. Era famoso por su trato amable con todos.
Su gran amor y su fuerza fueron la Santa Cruz con la que hizo muchos milagros. San Benito, fue un poderoso exorcista. Este don para someter a los espíritus malignos lo ejerció utilizando como sacramental la famosa Cruz de San Benito.
San Benito predijo el día de su propia muerte, que ocurrió el 21 de marzo del 547, pocos días después de la muerte de su hermana, santa Escolástica. Desde finales del siglo VIII muchos lugares comenzaron a celebrar su fiesta el 11 de julio.

Algunos Milagros de San Benito.

San Gregorio, contó algunos de sus milagros en su biografía de San Benito
El joven que no sabía nadar.
Un muchacho llamado Plácido cayó en un lago de gran profundidad, y estaba ahogandose. San Benito envió a su discípulo Mauro, que era su preferido: "Láncese al agua y sálvelo". Mauro así lo hizo, enseguida y llegó a sacarlo sano y salvo llevandolo hasta la orilla. Cuando salio del profundo lago recordó que no sabía nadar, y sin embargo había logrado atravesar esas aguas. Su obediencia al santo le permitio hacer aquel salvamento milagroso.
Edificio que cayo.
Estaban construyendo el monasterio, y se vino abajo una enorme pared sepultando a uno de los discípulos de San Benito. El se puso a rezar y envio a otros monjes que removiesen los escombros. Debajo de todo, apareció el monje sepultado, pero sano, como si hubiera despertado de un sueño.
La piedra que no se movía.
Sus religiosos constructores estaban tratando de quitar una inmensa piedra, pero esta no se podía mover ni un centímetro. Entonces San Benito les envió una bendición, y enseguida la pudieron quitar de allí, como si nada pesara .
Por esa causa, a raiz de esta anécdota, desde siglos atrás cuando las personas tienen algún grave problema en su casa que no consiguen alejar, buscan una medalla de San Benito y le rezan con fe, obteniendo prodigios.

2 comentarios:

Isa dijo...

San Benito necesito intercedas para que pronto tenga mi empleo al que estoy esperando respuesta donde me sentiré a gusto y estaré bien remunerada. Amén

Isa dijo...

San Benito necesito intercedas para que pronto tenga mi empleo al que estoy esperando respuesta donde me sentiré a gusto y estaré bien remunerada. Amén